Ya sabéis que soy fan de la tela de saco y todo lo que tenga que ver con rayas. ¿Recordáis el tuneo del escabel? ¿Y de la bandeja de madera? Pues cuando compré este taburete tenía una idea bastante clara de lo que iba a hacer con él.
La estructura estaba perfecta, pero la tela y las cinchas daban un poco de asquito así que decidí quitarlo todo.
Lo saqué todo y lo dejé simplemente en la estructura. Entonces pinté las patas de color blanco con la chalk paint casera que tanto me gusta.
Le grapé unas cinchas nuevas y entonces me di cuenta que lo había hecho mal. Tienen que cruzarse entre ellas para que sostengan mejor el peso, así que desgrapé tres de un lado, las crucé y vuelta a grapar.
Llegó el momento de tapizarlo. Compré una pieza de espuma de unos 4 cm de grosor y de densidad media, y un poco de guata para una mejor terminación, y lo grapé todo en su sitio.
Luego le puse un trozo de tela blanco que tenía por casa y decidí que le quería añadir algún detalle. Le transferí una imagen que tenía siguiendo este tutoria, ya veréis que es muy rápido y sencillo! Una vez que estuvo listo, con cinta de carrocero y pintura le hice las rayas.
Qué diferencia puede hacer un poco de pintura y tela, ¿no os parece? ¿Os gusta también la tela tipo saco?
Saludos,
Pili
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Te quedo fantástico, Pili.
Muchas gracias, María! Sí que es verdad que parece otro.
vaya cambio, precioso, fino y elegante. Me gusta un montón. Enhorabuena.
Gracias Consuelo, una pieza más rescatada y menos muebles creados en serie rondando por la vida.
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