Hola amigos! Bienvenidos a otro Reto de Rastrillo! Sí, vuelve a ser de nuevo el momento en el que un grupo de bloggers nos juntamos para mostrar nuestras creaciones o decoración a partir de piezas de rastrillos o de tiendas de segunda mano.
¿Quién dijo que poner tu casa bonita signifique gastar un montón de dinero en decoración? De hecho, a mi personalmente me encanta tunear las cosas que me encuentro por la calle o en rastrillos. Por esto este reto mensual es genial porque me ayuda a inspirarme con las craciones de mis compañeras.
Las reglas:
- Transformar un objeto(s) de una tienda de segunda mano, rastrillo o similar, en una pieza de decoración.
- No hay tema mensual.
- No hay presupuesto al que adaptarnos.
Conoce a las participantes
Amanda | The Kolb Corner Kim | Made in a Day
Victoria | Dazzle While Frazzled Pili | Sweet Things
Debra | Shoppe No. 5 Jeannee | Shepherds and Chardonnay Sue | A Purdy Little House
Kimm | Reinvented Ann | Duct Tape and Denim Kathleen | Our Hopeful Home
Dru | Polka Dot Poplars Toni | Small Home Soul Angela | Simply Beautiful by Angela
Michelle | Our Crafty Mom Marie | DIY Adulation Chelsea | Making Manzanita
Michelle | Michelle James Designs Denise | My Thrifty House Sara | Twelve on Main
Molly | Just a Little Creativity Chelc | Inside the Fox Den
Colleen | Life on Kaydeross Creek Florence | Vintage Southern Picks
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Mirad mi tesoro para este mes…
Este post contiene links afiliados para vuestra comodidad, podeis leer el disclosure completo.
¡Es un piecero de una cama! ¿Verdad que es precioso? Bueno ya me entendéis, no es precioso ahora mismo pero sí en esencia, ¿ya sabéis a qué me refiero verdad?
Las líneas blancas no sólo están pintadas sino también grabadas en la madera.
En cuanto lo vi tuve un momento de inspiración, ¿adivináis qué pensé? Si habéis dicho un banco entonces habéis fallado ;). Ya sé que todos sabéis cuanto me gustan los bancos con cabeceros, como el banco romántico y los bancos gemelos que hice para un apartamento en la playa.
Pero esto era un piecero, lo que significa que es más corto que un cabecero así que…qué tal si hiciera un colgador?
Síiiiii!!
Lo primero que hice fue cortar la parte redonda de las patas. Lo subí sobre mi sierra de mesa y ¡ale!, a cortar. Luego busqué un trozo de madera que tenía por ahí junto con la pila de las maderas, lo corté a la medida y le añadí unos tornillos por la parte trasera con el Kreg Jig. Esta máquina hace la vida realmente fácil.
Decidí que lo pintaría de blanco porque es muy grande, y de este modo se vería un poco más ligero allí donde se colocara.
Usé la pintura de leche Old Fashioned Milk Paint en el color Snow White. Me encanta porque es una pintura ecológica y todo lo que se necesita hacer es mezclar la misma cantidad de pintura (viene en polvo) con la misma cantidad de agua tibia. En concreto usé la versión de SafePaint porque no quería lijar el piecero y tampoco buscaba un efecto desconchado muy acentuado.
Le di dos manos por delante y por detrás, dejando secar entre capas. Viéndolo tan blanco y romántico pensé que un aire francés le iría de fábula. Diseñé con Photoshop el texto que le iba a transferir.
Al ver la imagen podéis pensar que me confundí y lo hice del revés, pero así es como se tiene que imprimir la imagen para hacer el transfer, en lo que llamamos «espejo».
Si tenéis curiosidad en saber como es la técnica del transfer, encontraréis un paso a paso muy detallado con fotos en este tutorial de como hacer transfer sobre madera.
Mientras el transfer se secaba, aproveché para desgastar las esquinas y así darle profundidad.
Aquí ya terminado y luciendo en todo su esplendor.
Conseguí los ganchos hace tiempo por un precio ridículo, así que el coste de hacer el perchero ha sido mínimo. ¡Estos son mis tuneos favoritos! Además los amigos que lo han visto no han intuído que antes era un piecero…
No tenía pensado quedármelo pero ahora viendo lo bonito que es me entran dudas sobre si venderlo o no… ojalá tuviera tanto espacio en casa para quedarme todo lo que hago!
Todo lo escrito en francés suena tan romántico…
El corazón de flores que cuelga de él lo hice con masa de cerámica casera y un bonito papel. De hecho, es el mismo que usé para mis corazones colgantes.
Realmente lo miro y me encanta no sólo como luce, sino lo sencillo que ha sido hacer un colgador desde un piecero de cama.
Espero que os haga gustado a vosotros tambien y no olvidéis visitar qué otras cosas han hecho mis compañeras.
Y ahora contarme, ¿sois basurillas como yo? ¿Cuál es la cosa más especial que os habéis llevado a casa?
Que tengáis un día estupendo!
Abrazos,
Pili
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