Hola amigos!
El tiempo vuela y aquí estoy de nuevo con otro Reto de Rastrillo. ¡Me encanta! ¿Queréis que os recuerde de qué va? Por supuesto, os pongo al día.
Nos hemos juntado un grupo de mujeres para mostraros lo que hacemos con cosas que compramos en rastrillos, tiendas de segunda mano e incluso tiradas en la calle… lo gratis es siempre bienvenido! Podéis ver proyectos de otros meses como la bandeja rústica, una vieja puerta tuneada y muchos más.
Las reglas:
- Reciclar un objeto de un rastrillo, tienda de segunda mano o hallazgo basuril en una pieza para el hogar. into a new piece of decor.
- No hay tema mensual.
- No hay un presupuesto al que limitarse.
Las participantes
Angela | Simply Beautiful By Angela – Gail | Purple Hues and Me – Carmen | Living Letter Home – Chas | Chas’ Crazy Creations – Jenny | Cookies Coffee and Crafts – Pili | My Sweet Things – Kathleen | Our Hopeful Home – Marie | DIY Adulation – Beverly | Across the Blvd – Michelle | Michelle James Designs – Molly | Just a Little Creativity
Aseguraos de seguir nuestro tablero en Pinterest para más inspiración!
Antes de presentaros mi proyecto de hoy quiero dejar algo claro: no soy siempre rápida o de inspiración fácil, y esta entrada servirá como ejemplo.
Mirad estas persianas de madera.
No puedo recordar exactamente cuando ni donde las encontré, pero han sobrevivido a dos mudanzas por lo que hace al menos cuatro años que las tengo.
En la foto parece que sólo hay una pero realmente cada una es doble, y yo tuve la suerte de encontrar dos.
Desde que las encontré sabía para qué quería usarlas. El problema es que no tenía en ese momento todas las herramientas que iba a necesitar y les ha tocado esperar muuuucho tiempo.
Las contraventanas son geniales y se pueden hacer muchísimas cosas diferentes con ellas. De hecho podéis visitar mi tablero de Pinterest de contraventanas.
Quería construir algo como un mueble auxiliar, pero luego pensé que ese tipo de persiana se ve bonita no importa desde que lugar la mires y entonces la idea de hacer tipo barra de bar surgió en mi mente. ¡Eso iba a hacer!
Persianas de madera recicladas en mueble auxiliar.
Lo primero que hice fue ir a buscar a mi stock particular de maderas a ver qué podía usar para hacer la base.
Un inciso, me había olvidado de comentaros que estas persianas llevaban unas bisagras. Quité todas las de una pero a la otra se las dejé puestas, de forma que al unir las dos persianas entre si formaban una «u».
Lo giré y corté esa pieza de madera a la medida de la base. Luego le hice unos agujeros para atornillarla a todo el contorno.
A mi personalmente me gusta avellanarlos porque así no sobresalen los tornillos. En esta base no tiene tanta importancia porque no va a ir directamente sobre el suelo, pero es mejor si un tornillo queda completamente integrado dentro de la madera.
Aquí está el cuerpo básico. De momento estaba completamente plano en el suelo pero quería que tuviera una pequeña altura, por lo que de nuevo fui a la pila de madera a ver qué encontraba. Unos pequeños tacos encolados y atornillados serían las patas.
Retiré los pestillos y llegó el momento de pintar. Si pudiera daros un consejo sería en invertir en una pistola de pintura. Creedme que no os va a gustar dar dos manos de pintura x 8 lados de ese tipo!
Yo uso mi HomeRight y estoy encantada con ella. Si queréis leer cómo usar una pistola de pintura lo podéis leer allí.
Con la ayuda de mi amiga quedó pintada en un abrir y cerrar de ojos. Si sois valientes y decidís hacerlo a mano, os recomiento usar mi receta de pintura a la tiza casera porque funciona de maravilla y podéis crear vuestro propio color.
Cuando estuvo terminado lo desgasté un poco y luego taladré unos agujeros para meter esas piezas que iban a soportar las baldas.
Lo último por hacer fue la parte de arriba. Quería que el sobre fuera rústico y como tenía algunas lamas de palet rondando por aquí las corté a la medida, las lijé bien y luego las teñí en color wengué. Solo le di una capa para que el color no fuera demasiado oscuro.
Para unir todas las lamas usé un trozo de madera y las atornillé por debajo.
Para unirlo al cuerpo del mueble avellané de nuevo, le puse los tornillos más oscuros que encontré y protegí con dos manos de barniz. Así sería más sencillo de limpiar también.
¡Y quedó listo!
Cuando lo empecé a construir mi idea era venderlo, pero luego viéndolo terminado pensé en quedármelo…
Mientras le hacía fotos no podía evitar pensar en Shakespeare y su dilema…ser o no ser. El mío era: vender o no vender…
Era la pieza perfecta para nuestra pequeña terraza cubierta de arriba y podría moverlo cuando tuviéramos fiestas para usarlo como una barra, que era el plan original.
Por otro lado, ya había construido algo para ese mismo lugar. ¿Donde iba a ponerlo ahora?
Como mi costi estaba de viaje no podía ser parte de la decisión, y el mueble me gustaba mucho así que era complicado.
Le pregunté a mis hijas, ¿nos lo quedamos y vendemos el otro? ¿Lo hacemos al revés?
Por supuesto una dijo venderlo y la otra dijo quedárnoslo.
Gracias chicas.
Este tenía más capacidad que el actual. Podía contener juegos, bebidas, mantas… lo que fuera que necesitáramos tener a mano.
Así que se me ocurrió que la pondría a la venta y si en dos días no se vendía me la quedaba y vendería la otra.
¿Pensáis que alguien que viera que son persianas de madera recicladas en un mueble auxiliar podría estar interesado?
Pues resulta que una cliente lo vio y me dijo que le gustaría pasar a verlo en persona, que estaba segura que le iba a gustar porque ya me había comprado el banco romántico y algunas otras cosas.
Por las fotos el mueble se ve precioso, pero lo es aún más en persona así que cuando vino a verlo se lo quedó. Le ayudé a subirlo al coche (pesaba como una mole!) y me prometió mandarme fotos cuando lo tuviera ya en su sitio.
Como lo prometido es deuda, aquí está ya en su casa de la playa.
Y yo no puedo estar más feliz de que lo disfrute. ¿Verdad que se ve bonito en ese lugar? Parece que estuviera destinado a estar allí.
Quien pensaría que unas persianas de madera pudieran dar tanto juego…
Gracias por seguir mis aventuras y felicidades si habéis llegado hasta el final, porque ha sido una entrada larga! Y vosotros, ¿tenéis por ahí persianas de madera esperando a ser usadas?
Si os apetece compartirla o guardarla en Pinterest para futuros proyectos, ¡adelante!